Y entonces entendí que el abuelo, así como la abuelita arrugada y todos mis parientes despreciaban por completo mis cuadros
(!vaya arte, que no consigue ningún tipo de parecido!)
y que apreciaban más la carne.
He aquí otra cosa que me contó mi madre de su padre, mi abuelo de Lyozno.
O tal vez lo he soñado.
Las fiestas de Suckess o de Simchass-Torá.
Le buscamos por todas partes.
¿Donde está, donde está?
Se ve que con el buen tiempo que hacía, el abuelo se habia subido al tejado, se había sentado encima de las tuberias y se estaba zampando unas zanahorias. No esta mal para un cuadro.
No me importa que la gente, con satisfacción y alivio, descubra en esas aventuras inocentes de mis parientes, el secreto de mis cuadros.
Marc Chagall, Mi vida, fragmento.
10 comentarios:
your style is different and unique. The effect that you get is amazing.
Ya sabes que yo la llamo Ogigia ¿verdad?
Amigo AK, thanks
Un saludo
Si! claro que lo sé, siempre me ha parecido una isla nuestra ciudad, casi rodeada por agua o en medio de un mar de cuero, como dijo un compañero tuyo.
Un beso
Es preciosa tu isla, la pintada, y la real, sabes cómo y cuánto me gusta, y que quiero volver algún día....antes de que en alguna fiesta se carguen la fachada de la Catedral a cohetazo limpio....
Un fuerte abrazo José Antonio.
Enrique.
Muchas gracias Enrique, aquí te espero!
Lo del cohete fue de traca, nunca mejor dicho... pero esto es lo que hay, una pena.
Un fuerte abrazo Enrique.
Bella acuarela teñida de sol, y hermosas palabras de Chagall.
Lo abrazo maestro.
M-
Muchísimas gracias Malena.
Un beso.
Me gustan tus dibujos. Tienen esa indefinición, esa austeridad de color que los hacen interesantes y el texto que acompaña añ último enriquece más la imagen. R. Vicent
Muchas gracias por tu visita y comentario Reyes.
El fragmento es de una especie de memorias de Chagall, son muy interesantes.
Un cordial saludo
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